jueves, 27 de diciembre de 2012


Derrumbe, clase e imperialismo
John Saxe-Fernández, La Jornada, Jueves 27 de Diciembre de 2012.
L
a persistencia de la crisis agudiza la agresión de clase y el riesgo de guerra general por el desgaste de los pilares materiales, socio-económicos y del derecho internacional de una frágil estabilidad interna y una precaria paz internacional. Más que crisis, parece un derrumbe estructural multidimensional sin precedente: detrás de la crisis que estalló en 2007, advirtió Samir Amín, se perfila a su vez la verdadera crisis estructural sistémica del capitalismo, cuya continuidad, tal y como lo hemos conocido...se ha vuelto, por primera vez en la historia, una verdadera amenaza para el porvenir de la humanidad y del planeta.
Esto ocurre, sea por la destrucción que conlleva el capitalismo de las bases naturales que sostienen la vida en la Tierra, resultado de su funcionamientonormal, sea por los crecientes riesgos bélicos ante la instalación por Estados Unidos, luego del 11/9, de un estado policial doméstico (Homeland Security) y un régimen de excepción internacional al calor de la guerra antiterrorista y laautodefensa anticipatoria.
La incertidumbre e inestabilidad acicatean la financiarización y especulación como parte de la acumulación, acentuándose las contradicciones y la agresividad internacional y de clase cuando la codicia por los combustibles fósiles convencionales y no-convencionales llevó a Bush, Blair, et al, a desatar un genocidio contra Afganistán e Irak seguidos por Obama en Libia en paralelo al despliegue mundial de bases y tropa, de poder aero-naval cerca de China, de desplantes anti-balísticos en Europa y de terrorismo de Estado con diseños de intervención y ocupación tipo Plan Colombia, en México (Iniciativa Mérida) y Centroamérica.
A lo largo de 30 años los programas de Ajuste Estructural (PAE) del FMI-BM devastaron agro, industria y empleo, canalizando la materia prima a la exportación, no a la transformación, por lo que se acompañaron de operativos decontrainsurgencia y de masacres como Acteal. Hoy, además de precipitar caos y desarticulación, los PAE refuerzan unacople depresivo global. Sus efectos no se limitan a Europa. Regresan a Estados Unidos acentuando desempleo y polarización, contagiando el orbe por lo vital de las exportaciones (v.gr, para los BRICS).
De cara al futuro inmediato y centrándonos en el enclaustramiento de México en la economía de Estados Unidos (La Jornada, 23/12/12 p.24) producto, no de la globalización de la economía como predican los country managers del BM que operan desde Hacienda, Banobras o Los Pinos, sino de la imperialización y pauperización de la sociedad en general y de la economía campesina e indígena en particular, con el TLCAN (rebelion.org/noticia.php?id=160940) y la IM como pivotes de subordinación. El PAE laboral y los que Peña Nieto tiene en cartera, se orientan a satisfacer, por la vía de las Public Private Partnerships (en inglés por ser lacondicionalidad de jugosos empréstitos del BM-BID), el hambre lobuna de aspirantes a consolidar –o ingresar– a lalista dorada Forbes. Los baronessacadólares y funcionarios asociados, salivan ante el festín privatizador de la salud y educación públicas a todo nivel, de Pemex –platillo mayor que incluye el gas de esquisto, del sistema penitenciario, de la infraestructura (Supervía) y de la ya de por sí vapuleada economía popular y de los sectores medios con un PAEfiscal que preserve sus privilegios. Si alguien busca una tragedia humana todavía mayor a la ya sufrida, ésta es la ruta.
Los PAE no están diseñados para generar empleo y estabilidad aquí. Destruyen encadenamientos productivos (en petroquímica, acero, ferrocarriles, astilleros, bienes de capital, etcétera), auspician la explotación de la mano de obra, ensamblando, maquilando (automotriz, y electrónica transnacionales), precarizan el trabajo, imponen topes salariales, aumentos en la canasta básica por la vía de gasolinazos, (parte de la mencionadacondicionalidad). Peor, juegan con el hambre del pueblo destinando raquíticos recursos públicos al campo, promoviendo vacíos de Estado y una informalidad económica” que coloca alcrimen organizado, al narcotráfico, entre los pocos instrumentos demovilidad social disponibles a los centenares de miles que cada año exigen una plaza decente. Este siniestro diseño, vigente por tres décadas, es el problema eje de seguridad nacional, máxime cuando la válvula de escape, la migración, se cierra más ante una crisis y grave desempleo en Estados Unidos, que van para largo.
De cara a un calentamiento global que ya gesta estrés hídrico y alimentario, procede un gran apoyo a la agricultura campesina e indígena, acatar los Acuerdos de San Andrés, fortalecer el mercado interno, la industria nacional y reflexionar lo dicho por el subcomandante Marcos ante 40 mil zapatistas que marcharon en absoluto silencio el 21 de diciembre:¿Escucharon? Es el sonido de su mundo derrumbándose. Es el del nuestro, resurgiendo...

jueves, 13 de diciembre de 2012


Infiltración y provocación deliberada
John Saxe-Fernández, La Jornada, Jueves 13 de Diciembre de 2012.
C
omo Peña Nieto (PN) anunció que instruiría al gabinete de seguridad a combatir y evitar la violencia y transitar de la campaña anticrimen calderonista, bajo auspicio de la Iniciativa Mérida –IM– de Estados Unidos (un diseño repleto de dólares para crear y nutrir clientelas de seguridad, hundido bajo el peso de 120 mil cadáveres) hacia un enfoqueintegral y de paulatina desmilitarización, es necesario analizar la inusitada violencia policial y callejera que se desató en el Distrito Federal y en otras ciudades del país el primero de diciembre durante la toma de posesión de PN, a la luz de un contexto de contradicciones entre esos objetivos y los hechos.
El principal problema de seguridad nacional viene del fracaso, para el 99 por ciento de la población mexicana, de los Programas de Ajuste Estructural (PAE) del FMI-Banco Mundial-BID, que por 30 años han asolado al país con sus corruptas privatizaciones, ofensiva anti-popular, desregulación a ultranza y apertura comercial unilateral, que han gestado más pobreza, polarización social, desempleo y desarticulación de vitales ejes de acumulación. De ahí la enorme informalidad económica, el crimen organizado y los vacíos de Estado en funciones vitales a la paz social y a la protección de territorio y mar patrimonial.
El endoso de PN a la regresión laboral anunció otra ronda de PAE en materia fiscal y más privatización de Pemex, con efectos sociales y políticos explosivos en el México en llamas que deja Calderón, una devastación descrita al detalle por Anabel Hernández (Grijalbo, 2012). Ello porque ante situaciones de desborde social y violencia, real o provocada, que afecta a terceros, como ocurrió días atrás, se desatendieron los protocolos vigentes para el uso de la fuerza pública, cuyos niveles y secuencias son: 1) presencia disuasiva, 2) persuasión verbal, 3) control físico de movimientos, 4) uso de fuerza no letal y 5) uso de fuerza letal, éstos dos últimos sólo en última instancia (La Jornada (LJ) 7/12/12 p.3). Antes del primero de diciembre se acordonó el Palacio Legislativo de San Lázaro y calles aledañas y se cerraron varias estaciones del Metro.
¿Cómo explicar el uso en San Lázaro de escudos policiales con planchas de acero de 5 mm, como para enfrentar a grupos con armas de alto calibre? ¿Quiénes son los responsables de losinformes de inteligencia que inducían escenarios para el nivel máximo?
Durante el combate de siete horas en San Lázaro y Bellas Artes/Alameda se reportó (LJ/2/12/12 p 6) que jóvenes con pasamontañas se sumaron a la Convención Nacional contra la Imposición y al movimiento #YoSoy132. Los encapuchados ¿o halcones? ya que hay fotos de algunos en el lado policial de los escudos, llegaron bien pertrechados para neutralizar los gases, armados con palos, tubos, bombas molotov, cadenas y piedras. Fueron eje de los choques con la Policía Federal y la del DF que, afirman testigos, les dejócampo libre para que destruyeran comercios, cafés, hoteles, bancos, mobiliario urbano, etcétera, para luego regresar a encapsular y detener a manifestantes pacíficos, en su mayoría jóvenes. Como en Estados Unidos, donde se despliega una campaña de infiltración, provocación y represión contra los ocupa y comunidades opuestas a la fracturación hidráulicapara extraer gas de esquisto, también caracterizada por la brutalidad policial y arrestos con penas máximas, en México fue un operativo no para minimizar la violencia, sino para enfrentar y disuadir, con daño a inocentes por el uso de armas no-letales (balas de goma en directo, reportándose su uso en ráfaga). No hubo salidas de escape. La policía cerró el frente y no permitió movilidad.Encapsuló a quienes protestaban en paz o iban de paso, acentuando la confrontación cuerpo a cuerpo. Pero no con los que, bajo paga, lucían vestimentas o claves de identificación.
Los analistas apuntan que cuando no se usa cañón de agua (o perros y caballos) para dispersar, es que se intenta provocar un choque violento y directo con civiles. Otro elemento nodal fue el traslado de detenidos, a quienes nunca se les acarrea sin inmovilizarlos. Personas que iban de paso fueron arrastradas hacia el transporte, cuando el protocolo indica que el transporte se acerca al detenido. Se procedió así para que se resistieran y declararlos en desacato. Buscaban detenciones numerosas, arbitrarias, con uso excesivo de fuerza y con acusaciones con penas de cinco a 30 años. Fue un operativoriesgoso e inútil para inhibir futuras movilizaciones de resistencia civil pacífica, criminalizándolas y con intención de afectar la base social de movimientos como el #YoSoy132.
Esto ocurre cuando Peña se acopla al ultra-secreto Acuerdo Trans-Pacífico (TPP) que penaliza países que protejan trabajadores, consumidores y medio ambiente, cuando anuncia más regresión fiscal, el despojo de la renta petrolera y las clientelas de seguridad se aferran a la IM: el brutal diseño oligárquico-imperial, paralelo al ajuste estructural.